La accesibilidad en la nueva ley de Universidades
El ministro de Universidades, Manuel Castells, anunció que la futura Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU) incluirá “de forma específica” el reconocimiento de la Lengua de Signos Española (LSE) y de los apoyos a la comunicación oral.
Así lo destacó en una intervención telemática durante la presentación del libro ‘Universidad y Discapacidad’ que ha editado el Comité Español de Representantes de personas con discapacidad (Cermi), en la que también participaron el presidente de esta entidad, Luis Cayo Pérez, y la directora de Programas con Universidades y promoción del Talento Joven de Fundación ONCE, Isabel Martínez Lozano.
En este diálogo organizado por la agencia de noticias Servimedia, Castells explicó que “ya existe un compromiso por parte de muchas universidades” sobre la accesibilidad para las personas con sordera, pero “ahora se recogerá de forma específica en la ley”.
De hecho, el reconocimiento de la LSE y de los apoyos a la comunicación oral es una de las múltiples medidas que el libro del Cermi propone para aumentar y mejorar la participación de los estudiantes con discapacidad en la universidad.
El ministro afirmó también que estudiará e intentará elevar al 5% el cupo de reserva para investigadores con discapacidad en las ayudas predoctorales, que actualmente es del 2%. “Vamos a intentar llegar” a este objetivo, afirmó, “siempre que exista un número suficiente de investigadores que cumplan todas las condiciones.
En su intervención, el ministro anunció que “en próximas semanas” se publicará el Real Decreto-Ley de Ordenación de Enseñanzas, que recogerá la obligación de reservar el 5% de las plazas de Grado a estudiantes con discapacidad superior al 33% o a aquellos con necesidades educativas espaciales permanentes vinculadas a esta condición.
Este texto, que “se convertirá en ley en cuanto se publique”, determinará también la formación en diseño universal o diseño para todas las personas. El ministro agregó que, en su artículo 3, la norma establecerá que los planes de estudio deberán tener como “referente los principios y valores democráticos y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y en particular el respeto a los principios de accesibilidad universal y diseño para todas las personas, de conformidad con lo dispuesto en la legislación”.
Por otro lado, Castells manifestó que algunas de las propuestas del libro ya han sido incorporadas a la normativa española, como el aumento de hasta el 50% en la parte fija de las becas para estudiantes con discapacidad. «Al reconocer que son un derecho subjetivo y eliminar el requisito de la nota (basta con aprobar), hemos beneficiado a un número mucho mayor de estudiantes”, destacó sobre los alumnos con discapacidad.
Otra de las reformas ya en marcha tiene que ver con la flexibilización en los requisitos para la acreditación de los doctores con discapacidad. Según Castells, la Agencia Nacional para la evaluación de la Calidad y la Acreditación (Aneca) también “ha incluido en sus procesos que las comisiones y comités tendrán en cuenta y valorarán aquellas condiciones especiales que afectan a los criterios de evaluación que sean de difícil cumplimiento” para estas personas.“Sobre todo, lo que tiene que ver con las estancias internacionales”, precisó.
En este sentido, reconoció la muy escasa participación del colectivo en los programas de movilidad Internacional y señaló que su departamento ha encargado al Servicio Español para la Internacionalización de la Educación (SEPIE) promover la inclusión de los grupos desfavorecidos, entre ellos los alumnos con discapacidad.
Fuente: SERVIMEDIA