Cómo pueden los videojuegos potenciar la vida de las personas con discapacidad
Es bien sabido en los tiempos actuales que los videojuegos son la principal afición del sector joven de la sociedad. Donde antes se jugaba a las canicas, a la comba o a otros juegos tradicionales, ahora la mayoría de los jóvenes prefieren entretenerse con esos aparatos tecnológicos que les permiten transportarse a distintos lugares, mundos fantásticos, mundos realistas, entornos competitivos, carreras, deportes etc.
Los videojuegos, además de ser una de las mayores fuentes de entretenimiento actual, superando a las industrias del cine y la música juntas, crean un importante debate en la sociedad sobre si son o no son apropiados para los jóvenes, si provocan problemas o ayudan a resolverlos, pero ¿cómo afecta esto a las personas con discapacidad?
Hasta hace poco, los videojuegos no tenían a este colectivo en cuenta pues no incluían alternativas de control en el software ni existían productos de apoyo o complementos que permitieran a las personas con discapacidad disfrutarlos independientemente de la edad o los gustos. El problema consistía en la falta de opciones y de atención de las compañías creadoras de hardware y software en las personas con discapacidad. Por suerte, esto está comenzando a cambiar.
Existen productos de hardware que permiten a personas con poca movilidad en sus manos como, por ejemplo, agarrotamientos o problemas motrices, jugar a los videojuegos con un amigo o familiar e incluso solos. Así también las desarrolladoras están comenzando a potenciar las distintas medidas de accesibilidad en lo que se refiere a software, gestionando la percepción del color, variedad en el uso de los controles, entre otras. Uno de los últimos lanzamientos ha incluido hasta 60 medidas de accesibilidad.
Todas estas medidas favorecen la inclusión del colectivo de las personas con discapacidad en el sector de los videojuegos, permitiéndoles desarrollarse socialmente y mejorar sus relaciones tanto a nivel personal como profesional. Ahora, las empresas no solo buscan personas con mucha formación, o una formación específica, algo sin duda, imprescindible para valorar un currículum, sino que también se requieren otro tipo de habilidades, las conocidas habilidades blandas.
Las habilidades blandas son el resultado de una combinación de habilidades sociales, de comunicación, de forma de ser, de acercamiento a los demás, que hacen que una persona sea capaz de relacionarse y comunicarse de manera efectiva con otros. Entre las habilidades blandas más importantes se encuentran: trabajo en equipo, liderazgo, comunicación, flexibilidad, paciencia, persuasión, gestión del tiempo, y motivación entre otras.
Con el conocimiento de la importancia de estas habilidades en la incorporación laboral de todas las personas, la Fundación ONCE lleva un tiempo trabajando en proporcionarle a las personas con discapacidad herramientas de mejora de estas habilidades blandas a través de los videojuegos. Entre estas iniciativas se encuentra el concurso Disability Serious Game, con el objetivo de impulsar el desarrollo de videojuegos inclusivos que incorporen la temática de la discapacidad, y de sensibilizar, concienciar y normalizar la percepción que tiene la población general sobre el colectivo de personas con discapacidad. También se organizó la mesa “Videojuegos Inclusivos” en el III Congreso de Tecnología y Turismo de 2019 contando con la partipación de Microsoft, Electronic Arts y la Asociación Española del Videojuego. De igual forma, se continúa trabajando en futuras iniciativas, ya que este ámbito está en pleno crecimiento, aumentando cada día las oportunidades que ofrece.